7 consejos básicos para practicar yoga en casa

Ya estamos en pleno verano, y practicar yoga en casa puede llegar a ser algo muy complicado. En este blog ya he compartido muchos consejos de cómo realizar un práctica casera, pero nunca está de más repasar los conceptos básicos.

1) Practica cada día

Para establecer un hábito diario es mejor dedicar quince minutos cada día que una hora a la semana. No importa que durante el verano tus practicas de yoga sean más cortas, lo que te interesa en mantener la constancia. Realizar cinco saludos al sol A son cinco minutos, no hay excusa posible.

Eso sí, descansa por lo menos un día a la semana, el cuerpo y la mente necesitan recuperarse.

2) Hazlo a primera hora

Los días veraniegos son agujeros de gusano en los cuales las horas desaparecen sin dejar rastro. No dejes tu práctica de yoga para luego, levántate de la cama y practica, después tendrás todo el día para ti y los tuyos. Si por alguna causa te es imposible ponerte a primera hora, hazlo a última hora, pero entonces realiza sesiones suaves.

3) Motívate

Busca motivación por todos lados, en vídeos de YouTube, en Instagram, Pinterest, o en libros. Estamos en la era de la comunicación online, en cualquier recuncho de la red encontrarás motivos para practicar. También es interesante hacer un reto personal o en redes sociales.

4) Ten un grupo

La importancia de pertenecer a una tribu puede marcar una gran diferencia en tu práctica casera de yoga. Puedes quedar con tus amigas y familiares una vez por semana para practicar juntas o bien a través de internet, también enviaros fotos de algunas posturas y compartir los conocimientos que vais adquiriendo con la práctica. Tener amigas yoguis es un tesoro.

5) Simplifica

No te obsesiones con hacer florituras ni asanas complicadas. Deja todo eso para cuando vuelvas a clase con tu profesora de cabecera o bien si vas a un taller. Busca una práctica sencilla que te aporte valor y seguridad, y afiánzala durante el verano. Practicar cada día la misma secuencia es un ejercicio maravilloso para conocer los límites de tu cuerpo y mente.

6) Disfruta

Si tu práctica no te gusta, busca otra. Tienes que disfrutar de lo que haces para tener una continuidad y establecer el hábito diario. Practicar en soledad puede ser duro, pero si encima lo haces a disgusto puede ser una tortura.

7) Practica

Así de sencillo y simple. Practica, practica y practica. No hay más. El yoga quiere yoga. Para establecer una práctica de yoga diaria necesitas colocarte cada día en tu esterilla. Lo que pase en ese rectángulo es cosa tuya. Habrá días mejores y peores. Habrá días en los que tu cuerpo será como plastilina y otros como una viga de hormigón. Habrá días que tu mente estará inquieta y no querrá hacer nada y otros en los que estarás enfocada y llena de objetivos.

Observa todos tus estados en la práctica y aprende de tu sabiduría interna.

¡Feliz verano!

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